
El examen comienza con la observación a distancia, que puede ayudar a detectar anomalías en los patrones de la marca, la respiración, la postura, la coordinación, la fuerza y la visión del gato.
La presión arterial, el peso y la hidratación
Se hace la medición de la presión arterial. El riesgo de hipertensión está más presente en gatos mayores, y más aún en gatos de más de 10 años. La hipertensión no tratada puede ser causa de daños en otros órganos como corazón, ojos, cerebro o riñones… y también puede ser secundaria a una enfermedad subyacente como hipertiroidismo o enfermedad renal.
Se procede a pesar y establecer y comparar la condición corporal del animal con visitas anteriores.
Se vigila el estado de hidratación. Una mala hidratación puede alertar de la enfermedad renal crónica o de la diabetes mellitus.
La piel, la boca, la vista
Se evalúa el estado de la piel, el pelaje y las uñas. El mal estado de las uñas y la presencia de nudos sobre todo en la zona del tercio posterior. Puede indicar que el gato está sufriendo dolor por artrosis y esta evitando usar el rascador o rehusa asearse.
Una revisión de la boca evaluando la presencia de sarro y gingivitis, estado bucal… que puede provocar dolor al comer y masticar siendo una posible causa de perdida de peso.
Exploración ocular, revisando el color del iris, el área de la retina y las cámaras anterior y posterior. Una buena exploración ocular puede avisar de hipertensión y desprendimientos de retina e incluso puede alertar de futuros tumores.
La palpación y auscultación
La palpación del cuello puede descubrir problemas de hipertiroidismo.
La auscultación torácica y examen abdominal determinan la frecuencia cardiaca y respiratoria, descubren posibles soplos y arritmias y permite evaluar los sonidos pulmonares.
El examen de las articulaciones puede ayudar a identificar engrosamientos, dolores y amplitud de movimiento.
La observación de la masa muscular es evaluada y puntada según baremos. Puede delatar zonas de dolor e infecciones.
Por todo ello, si eres propietario de un felino de edad avanzada no olvides llevarlo a revisiones periódicas. En Laclínicaveterinaria realizamos de rutina este tipo de chequeos acompañados de pruebas diagnósticas que complementan la exploración. Pregúntanos por los Reconocimientos de Salud geriátricos.