Endoscopia veterinaria: diagnóstico mínimamente invasivo para perros y gatos
La endoscopia veterinaria es una técnica avanzada de diagnóstico y tratamiento que permite explorar el interior del cuerpo del animal de forma mínimamente invasiva, sin necesidad de cirugía abierta. Utiliza un tubo flexible equipado con una cámara que se introduce por orificios naturales (como la boca, la nariz o el recto), lo que permite obtener imágenes en tiempo real de alta calidad.
En nuestra clínica veterinaria de Madrid disponemos de equipamiento endoscópico de última generación y personal veterinario especializado, lo que nos permite realizar procedimientos seguros, rápidos y con una recuperación mucho más cómoda para el animal.
Principales usos de la endoscopia veterinaria
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Endoscopia digestiva: diagnóstico y extracción de cuerpos extraños, biopsias gástricas o intestinales.
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Endoscopia respiratoria (rinoscopia, traqueoscopia, broncoscopia): útil en casos de estornudos crónicos, tos, sangrados nasales o dificultad respiratoria.
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Endoscopia urinaria: evaluación de la uretra, vejiga o tracto reproductor.
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Otoscopia avanzada: exploración del conducto auditivo en otitis crónicas o masas en el oído.
Gracias a la endoscopia, es posible obtener un diagnóstico preciso y tomar muestras sin necesidad de cirugía, lo que reduce el estrés, el dolor y el tiempo de recuperación del animal.
Preguntas frecuentes
¿En qué casos está indicada la endoscopia en perros y gatos?
La endoscopia se recomienda en casos de problemas digestivos persistentes, tos crónica, sospecha de cuerpos extraños, rinitis, vómitos inexplicables, sangrados nasales, dificultad para orinar o para obtener biopsias internas sin cirugía. Es una herramienta muy eficaz para diagnosticar con precisión sin intervención invasiva.
¿La endoscopia veterinaria requiere anestesia?
Sí, para garantizar el bienestar del animal y permitir una exploración completa, se utiliza anestesia general segura y monitorizada. Al tratarse de un procedimiento poco invasivo, la recuperación tras la anestesia suele ser rápida y sin complicaciones, y el animal puede volver a casa el mismo día.